El periódico The New York Times reveló que el celular de Alejandro Encinas estaba hackeado mientras investigaba violaciones a los derechos humanos por parte del ejército. El subsecretario de derechos humanos estuvo vigilado por los militares, quienes tuvieron acceso a toda su información; conversaciones de WhatsApp, imágenes, audios y correos electrónicos.
El periódico asegura que un análisis forense independiente confirmó el hackeo.
El Ejército hizo «trabajo de inteligencia» hackeando el celular de Alejandro Encinas
El espionaje de Encinas se dio en el marco de unas investigaciones que se estaban haciendo por unas supuestas violaciones a los derechos humanos y abusos cometidos por parte del Ejército.
Encinas ha criticado fuertemente las decisiones de la 4t en cuanto al poder que le ha otorgado a las fuerzas armadas. El subsecretario de derechos humanos señaló a los militares por la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa y también los acusa de cometer abusos contra civiles desarmados.
“La licencia de Pegasus está permitida solo a agencias del Gobierno, y aunque no hay pruebas definitivas sobre cuál es la que realizó el hackeo al celular de Encinas, el Ejército es la única entidad en México que tiene acceso al programa espía», revela The New York Times.
De hecho, según el reportaje, el ejército mexicano es el que más a infectado celulares con esta tecnología (más que cualquier otra institución gubernamental del mundo).
Tomás Zerón de Lucio compró Pegasus (el software que se usó para espiar a Encinas)
Tomás Zerón de Lucio, exdirector de la la Agencia de Investigación Criminal, adquirió Pegasus, el software que ha sido empleado para espiar de manera ilegal a periodistas y activistas. Esto fue confirmado por dos contratos del 2016 y del 2017; uno fue por un monto de 113 millones 41 mil 500 pesos y el otro por 107 millones 786 mil 823 pesos.
Este software es vendido a los gobiernos con el fin de investigar actos delictivos, según explica NSO Group, el fabricante de Pegasus. Supuestamente su uso requiere de «un alto respeto a los derechos humanos y su venta se efectúa con socios en cada país con principios éticos»…
Según el diario estadounidense, el último espionaje en el teléfono de Alejandro Encinas ocurrió en 2021 mientras dirigía la Comisión de la Verdad para saber qué ocurrió con los 43 estudiantes de Ayotzinapa.
Esta revelación se suma a la investigación que ya existe contra Zerón, prófugo en Israel, por adquirir el software espía para uso de la Procuraduría General de la República en el sexenio de Enrique Peña Nieto.
López Obrador dice que el Ejército hace «trabajo de inteligencia e investigación» no espionaje…
El presidente de México ha defendido, en diversas ocasiones, a las fuerzas armadas y ha asegurado que los militares no hacen espionaje con Pegasus. López Obrador admitió que el Ejército ha usado el sistema “para hacer investigación, no espionaje” y afirmó que ahí no hay nada de ilegal.
“Es importante que el Instituto de Inteligencia haga una investigación para no usar la fuerza”, dijo el presidente.
Debido a las denuncias de un mal uso de Pegasus, el Instituto de Transparencia quiere que las fuerzas armadas publiquen los contratos por el software espía. El organismo le pide a la Sedena que entregue toda la información sobre el uso del malware durante el sexenio de López Obrador.
El reportaje de The New York Times revela que la NSO está investigando si el uso de Pegasus en México violó las normas del Ministerio de Defensa israelí, que otorga licencias de venta de programa espía a agencias gubernamentales bajo la condición de que sea usada para combatir la delincuencia grave y el terrorismo.
“Si NSO confirma que Encinas y los demás fueron atacados sin motivo legítimo, la empresa podría cancelar de inmediato el acceso del ejército mexicano a Pegasus”, explica el periódico.
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