Ciudad de México, 9 Mayo.- A una semana de que un juez federal ordenara vincular a proceso y suspender a Sergio Palacios Trejo, coordinador y administrador de la Central de Abasto de la Ciudad de México (CEDA) por cometer supuesto desacato, él asegura que no ha cometido ningún delito y por el contrario hay violaciones al proceso.
El Andén platicó con Palacios Trejo sobre el asunto que lo lleva a enfrentar un proceso penal por el litigio entre dos empresas que se disputan el manejo de baños, peaje y estacionamiento del mercado mayorista.
Todo deriva de dos juicios administrativos, para ser más precisos porque una resolución del Tribunal de Justicia de la Ciudad de México nos ordena que retiremos a las empresas que estaban prestando los servicios en la Central y que los operáramos a través de terceras personas, nosotros hacemos lo que nos ordena el tribunal, el juez les concede amparo y suspensión definitiva, pero del otro lado, los nuevos encargados hacen lo propio y el juez les da una suspensión definitiva, había dos suspensiones definitivas, no estoy incumpliendo desacato de ninguna.
Me llegó un citatorio por correo electrónico un martes para que compareciera el miércoles siguiente, y en una semana ya estaba imputado, cuando este tipo de procesos pueden tardar meses o años.
Con el nuevo sistema penal acusatorio, en teoría se partía del principio de inocencia de las personas, aquí lo que sucedió es que me están culpando por adelantado y en los hechos, porque pidieron dos medidas cautelares: una que vaya a firmar al reclusorio como si me pudiera evadir de la justicia; y que se me suspendiera de mi cargo,argumentando que soy un potencial delincuente, peligroso y que podía destruir documentación, cuando todo viene de un juicio administrativo y el archivo está en un juzgado y no puedo destruir nada.
No estoy desacatando nada porque no se me ha instruido nada, y no obstante se inicia una causa penal.
Hay un equipo de trabajo muy serio y profesional, habrá alguien que tenga que tomar decisiones y firmar pero no se para la operación de la Central de Abasto.
Todo se desarrolló en una sola audiencia, nos presentamos ante el juez penal, y en esa misma audiencia se determinó mi situación, todo fue en un lapso de dos horas.
No me citó el ministerio público, sino directamente en el juzgado, nunca se me citó para decirme se te acusa esto, ¿qué puedes decir’, sino que a partir de la denuncia que presenta el representante legal de las empresas que se sienten afectadas, el ministerio público toma el asunto y lo lleva directamente ante el juez, cuando el juez administrativo es el que debería denunciar ante el ministerio público mi eventual desacato no un particular.
Lo primero que estamos buscando es que esas medidas cautelares cesen, que son la suspensión y el que tenga que ir a firmar como si fuera delincuente consumado, para que no evada la justicia.
El asunto es muy desgastante y terrible, pero al no haberse cometido ningún desacato tiene que resolverse de la mejor manera, vamos a dar la batalle jurídica, porque no va a haber ninguna prueba que acredite que he desacatado la instrucción de un juez.
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