CIUDAD DE MÉXICO.
La música es una forma de comunicación, es un lenguaje y una experiencia, e independientemente de las culturas y nacionalidades, provoca que éstas se unan en una práctica de comunicación, consideró la concertista hongkonesa Elim Chan.
Con apenas 28 años de edad, será la directora huésped de la Orquesta del Teatro Mariinsky, una de las agrupaciones rusas con mayor tradición y prestigio, que tocará por primera vez en México, a partir de hoy y hasta el 4 de marzo, en el Palacio de Bellas Artes y el Auditorio Nacional.
La joven, para quien pararse en el escenario más que miedo le provoca un verdadero gozo, expresó su emoción por dirigir a la agrupación rusa en el máximo recinto cultural del país, hoy y mañana.
Siempre atenta, indicó que a pesar de los diferentes lenguajes, a nivel musical esas barreras no existen. “Amo cada nota y soy capaz de expresarla con mis manos, para mí, lo más importante es la comunicación”, abundó.
También puso énfasis en que respeta mucho a la orquesta, por la tradición de donde viene y consideró que su mayor fortaleza es el sonido que produce y que es uno único para el repertorio de cada ensamble que
dirige.
Bajo la batuta de Chan, hoy en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes, la Orquesta Mariinsky interpretará las obras Obertura festiva, de Dimitri Shostakovich; así como Rapsodia sobre un tema, de Paganini, y Sinfonía número 2, de Sergei Rajmaninov.
Mañana brindará al público la Obertura de la gran Pascua rusa, de Nikola Rimski-Korsakov; Concierto para piano número 2, de Rajmaninov, y Sinfonía número 5, de Shostakovich.
Esta será la primera vez que la joven directora conduzca al ensamble ruso; Chan fue la primera ganadora del Concurso de Dirección Donatella Flick de la Orquesta Sinfónica de Londres en diciembre del 2014.
Como parte del premio fue nombrada directora asistente de la agrupación británica en su temporada 2015-2016.
Source: Excelsior
